El papa Benedicto XVI felicita a la Hermandad del Santísimo Cristo de los Afligidos por la Navidad y el Año NuevoDesde El Cañamelar, José Ángel Crespo Flor).- El papa Benedicto XVI ha tenido la amabilidad de corresponder a la felicitación que, en su día y con motivo de las pasadas fiestas, cursó la Hermandad del Santísimo Cristo de los Afligidos y ha correspondido felicitando a la citada Hermandad por las Fiestas de la Navidad y por el Año Nuevo recientemente comenzado y más vale tarde, quiero relatarlo en el BLOG DE EOS.
Por supuesto que la respuesta del Papa Benedicto XVI ha causado la natural alegría y satisfacción entre los componentes de la Hermandad que han prometido guardarla en un sitio de privilegio ya que como confesaron “no todos los días se recibe una felicitación de tan importante personalidad. Cierto que, como ya hemos venido haciendo estos últimos años, nosotros le cursamos en tiempo y forma, una tarjeta de felicitación pero no es menos cierto que su respuesta tiene mucho más valor, primero por tratarse de quien se trata y después porque el Santo Padre tiene multitud de compromisos que atender y no digamos de felicitaciones que contestar antes de la nuestra. La alegría, por lo tanto, es grande y la recibimos con la natural satisfacción y orgullo y más en este 2010 en que nuestro Titular celebra el 125 aniversario de la primera salida oficial de este Crucificado por las calles del Cañamelar, entonces conocido como Pueblo Nuevo del Mar. Orgullo que deseamos compartir con toda la familia semanasantera o por lo menos con nuestros verdaderos amigos, menos de los que en un principio nos imaginábamos”.
Junto a la felicitación se acompaña una carta que lleva la firma de Mons. Peter B. Wells quien, en calidad de asesor, nos ha hecho llegar estas letras: “El Santo Padre agradece vivamente la cordial felicitación enviada con motivo de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, en las que la iglesia conmemora gozosa el Nacimiento de Jesucristo, luz de las naciones.Su Santidad Benedicto XVI corresponde a esta delicada atención, pidiendo al Señor que derrame sobre todos los hombres la abundancia de su paz y de su amor, a la vez que, invocando sobre sus seres queridos la amorosa protección de María Santísima, Madre del Salvador, le imparte con afecto la Bendición Apostólica.
Esta felicitación del Santo Padre se une a la que recibimos de nuestro Sr. arzobispo, monseñor D. Carlos Osoro, otros obispos valencianos con responsabilidades en otras diócesis, el ser el final de la cabalgata de Reyes del Cañamelar y ese intento por mantener 125 días -los mismos que años celebramos de aquel 1885- encendida la Luz de la Paz de Belén. Son acontecimientos, cada uno importante por si mismo, que nos dan fuerzas para ‘atacar’ como Dios manda esta efemérides y que durante todo este año recordemos aquella primera salida del patrono del Cañamelar que coincidió con aquel terrible cólera de 1885 que marcó la vida de muchos de nuestros antepasados.
Por supuesto que la respuesta del Papa Benedicto XVI ha causado la natural alegría y satisfacción entre los componentes de la Hermandad que han prometido guardarla en un sitio de privilegio ya que como confesaron “no todos los días se recibe una felicitación de tan importante personalidad. Cierto que, como ya hemos venido haciendo estos últimos años, nosotros le cursamos en tiempo y forma, una tarjeta de felicitación pero no es menos cierto que su respuesta tiene mucho más valor, primero por tratarse de quien se trata y después porque el Santo Padre tiene multitud de compromisos que atender y no digamos de felicitaciones que contestar antes de la nuestra. La alegría, por lo tanto, es grande y la recibimos con la natural satisfacción y orgullo y más en este 2010 en que nuestro Titular celebra el 125 aniversario de la primera salida oficial de este Crucificado por las calles del Cañamelar, entonces conocido como Pueblo Nuevo del Mar. Orgullo que deseamos compartir con toda la familia semanasantera o por lo menos con nuestros verdaderos amigos, menos de los que en un principio nos imaginábamos”.
Junto a la felicitación se acompaña una carta que lleva la firma de Mons. Peter B. Wells quien, en calidad de asesor, nos ha hecho llegar estas letras: “El Santo Padre agradece vivamente la cordial felicitación enviada con motivo de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, en las que la iglesia conmemora gozosa el Nacimiento de Jesucristo, luz de las naciones.Su Santidad Benedicto XVI corresponde a esta delicada atención, pidiendo al Señor que derrame sobre todos los hombres la abundancia de su paz y de su amor, a la vez que, invocando sobre sus seres queridos la amorosa protección de María Santísima, Madre del Salvador, le imparte con afecto la Bendición Apostólica.
Esta felicitación del Santo Padre se une a la que recibimos de nuestro Sr. arzobispo, monseñor D. Carlos Osoro, otros obispos valencianos con responsabilidades en otras diócesis, el ser el final de la cabalgata de Reyes del Cañamelar y ese intento por mantener 125 días -los mismos que años celebramos de aquel 1885- encendida la Luz de la Paz de Belén. Son acontecimientos, cada uno importante por si mismo, que nos dan fuerzas para ‘atacar’ como Dios manda esta efemérides y que durante todo este año recordemos aquella primera salida del patrono del Cañamelar que coincidió con aquel terrible cólera de 1885 que marcó la vida de muchos de nuestros antepasados.
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