UN LIBRO PARA LEER ESTE VERANO : "EL CIELO AZUL DEL MAR" DE LA NOVEL ESCRITORA VALENCIANA, GLÒRIA DURÀ VILÀ
(DESDE EL CANYAMELAR DE VALENCIA, JOSÉ ÁNGEL CRESPO FLOR).- En primer lugar hay que decir que el libro, "El cielo Azul del Mar", desde su niñez hasta que se convierte en mujer, no es un libro religioso aunque su lectura nos lleva a ese ser superior que los católicos llamamos Dios.
Gloria Durà Vilà, su joven autora, no huye de lo religioso de ahí que cada uno de sus tres capítulos esté prologado por una cita bíblica. Así, en el primer capítulo que titula "Recuerdos Azules" se fija en un texto de Corintios para proclamar que "Cuando era niño hablaba como niño, pensaba como niño, razonaba como niño; al crecer, dejé las cosas de niño. Ahora vemos como en un espejo, oscuramente, en enigma; entonces veremos cara a cara. Ahora conozco de un modo imperfecto, parcial, entonces conoceré plenamente, así como Dios mismo me conoce".
En el capitulo 2º (Recuerdos grises) ha colocado un texto de Isaías. Este: "No tengas miedo, pues yo estoy contigo; no vivas con ansia, pues yo soy tu Dios. Yo te fortaleceré, yo te ayudaré y te sostendré. Haré brotar rios en las cumbres peladas y fuentes en medio de los valles, transformaré el desierto en estanque, la tierra árida en manantiales de agua
"El capitulo 3º ha servido para que la autora se vaya a la Biblia y escoja una cita del Cantar de los Cantares. Esta: "Ponme como un sello sobre tu corazón, como una marca sobre tu brazo; porque fuerte es como la muerte el amor. Ni los mares podrían con sus aguas apagar del amor el incendio ni los rios podrán extinguirlo". Hasta aquí las tres citas bíblicas que precisa el libro en cuestión.
Ahora lo que dice un recorte de periódico informa de una misteriosa noticia:
"...buceadores hallan una pequeña caja de plomo cerca de la costa de Sicilia que contiene una carta manuscrita firmada por Meélisande Valery y enigmáticamente dirigida a una tal Diosa del Mar, posiblemente la Anfitrite de la mitología griega... Uno de los aspectos más fascinantes de este decubrimiento es la mención que se hace de un famoso virtuoso del violonchelo llamado Giorgio Azzurrino del que Mélisande confiesa a la diosa estar enamorada y que podría tratatrse del compositor siciliano del siglo XIX del mismo apellido...
"Mercedes Vilà, vicedirectora del Instituto Diocesano de Ciencias Religiosas (IDCR) ha escrito del libro que "se trata de una novela diferente, es la carta que Mélisande escribe a esta deidad marina. Escrita en primera persona, el lector pronto se da cuenta de tener acceso a un escrito íntimo, privado, donde la protagonista expone sus sentimientos con total libertad, honestidad y confianza. serenos testigos, a través de sus ojos, del tumultuoso viaje de descubrimiento personal en el que se embarca desde su niñez hasta que se convierte en una mujer".
Más adelante y en el mismo escrito Mercedes señala que "se trata de una narración de pérdida, supervivencia y renacimiento que encandilará y atrapará con la fuerza lírica de su voz. Este libro se balancea con el ritmo del mar y vibra con la música tan central en la vida de Mélisande. Su prosa descriptiva, vital y alegórica resuena con el simbolismo de los colores.
"Para saber detalles de su autora señalaremos que Gloria Durá Vilá estudió medicina en Valencia, su ciudad natal, antes de especializarse en psquiatría en Londres. Además, ha cursado estudios y llevado a cabo una labor investigadora los campos de la antropología médica y la psiquiatría cultural. Esta es su primera novela. Actualmente se dedica a la práctica de la psiquiatria infantil y juvenil, la enseñanza y la investigación en la Universidad de Londres
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