La Hermandad del Santísimo Cristo de los Afligidos ofreció una misa en honor del ex-jesuita y cooperante Vicente Ferrer Moncho fallecido en la India(Desde El Cañamelar, José Ángel Crespo Flor).-La Hermandad del Santísimo Cristo de los Afligidos, que está celebrando el 80 aniversario de su primera salida como colectivo en la Semana Santa Marinera de Valencia (SSMV), sólo tener conocimiento del fallecimiento del ex-jesuita y cooperante Vicente Ferrer Moncho, muy vinculado con la Comunidad Valenciana y en particular con Valencia -pasó su niñez en Gandia- se aprestó a ofrecer una Misa por el eterno descanso del ex-jesuita dedicado ahora por entero a atender a los más desfavorecidos del planeta. Misa que fue oficiada por el vicario de la parroquia Nuestra Señora del Rosario del Cañamelar, el sacerdote cubano Olbier Antonio Hernández Carbonell.
El trabajo de Vicente Ferrer en la India, en las clases ,menos agraciadas, hay que entenderlo bajo el punto de visto del Evangelio de Jesús. Un evangelio, la Palabra misma de Cristo, que se hace realidad en la vida y obra de este santo en vida laico del siglo XXI.
De Vicente Ferrer Moncho no me importa tanto el Credo que realizaba sino lo que hacía con la gente menos favorecida por la madre naturaleza. No resulta nada extraño pues, el profundo cariño y amistad que se le profesaba no ya en la India sino en el Mundo entero y, en particular, en España donde se le llegó a conocer como el 'san Vicente Ferrer' del siglo XXI por todxo lo que realizó en los 40 años que llevaba en la India.
Tampoco resulta extraño que el Gobierno valenciano que preside Paco Camps, muy sensible con todo lo que sea coperativismo y ayuda a los más necesitados, haya decidido otorgarle a título póstumo, en las nominaciones del 9 de octiubre, la máxima condecoración del Gobierno Valenciano algo en lo que quiero insistir para mostrar su probada generosidad con los más desfavorecidos y su preocupación constante por los más pequeños. hasta el punto de ofrecer su misma comida para los que no tenían nada que llevarse a la boca.
De él se ha dicho muchas cosas. Pero me quedo con una que demuestra su austeridad y su forma de vivir. En una de sus visitas a Gandía, la familia se reunió para comer en un hotel de la ciudad y Vicente Ferrer pidió como menú una ensalada y dos huevos fritos. Desde luego Gandía, además de los Borja tienen en la persona de Vicente Ferrer un referente del que sentirse orgulloso. Pero voy más lejos, la labor desplegada por Vicente Ferrer a los largo de toda su existencia terrenal necesita tener continuidad. Sabemos que desde el Gobierno Valenciano que preside Francisco Camps esto se va a llevar a término pero tiene que ser Gandia y los gandienses los que continúen la fecunda y ardua labor de apostolado 'bien entendido' que ha llevado Vicente Ferrer en la India con los más desfavorecidos.
LUTO EN GANDIA
El Ayuntamiento de Gandia decretó una jornada de duelo por la muerte en la India de Vicente Ferrer Moncho, Hijo Adoptivo de la ciudad, por lo que las banderas oficiales ondearon a media asta en el balcón del edificio del Ayuntamiento.
Vicente Ferrer, hijo de padres gandienses y que vivió su infancia en Gandia, donde sus progenitores regentaban un hostal en la plaza del Prado, fue nombrado Hijo Adoptivo de Gandia el 15 de mayo de 2001 en una sesión extraordinaria celebrada por el Ayuntamiento en un Pleno, en el que también se acordó titular con el nombre de ‘Fundación Vicente Ferrer' una calle de la ciudad.
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